Las hojas en blanco no están vacías están llenas de nuestro vicio marcado encima de la mesa. Nuestras miradas cuando se encuentran no están llenas aunque sí vacías de aprovechar cada segundo nuestra pasión sin límites. Nuestras dos almas en una están completas con nuestros cuerpos destrozados de ansía... Quiero escribir en tu lienzo imperfecto lleno de cicatrices apasionadamente, besarte como un libro matemático que a veces sea fácil o difícil de resorber. Aunque siempre con nuestras manos juntas y que sobren las palabras pero nunca los echos.
Solo deseo que mis pensamientos ayuden no solo abrir alas. Que sientan toda la fuerza, amor, paz y felicidad que merecemos para volar.